Guillermo Francos advirtió que habrá más recortes en el Congreso

El jefe de Gabinete señaló que la nueva fórmula generaría un «perjuicio» para las cuentas fiscales. El funcionario adelantó que el Gobierno avanzará con el recorte de otras partidas presupuestarias para mantener el superávit fiscal.

El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, advirtió que el Gobierno continuará con más recortes si el Congreso Nacional insiste con la reforma de la fórmula de movilidad jubilatoria, aprobada ayer martes por la Cámara de Diputados. Francos señaló que la nueva fórmula generaría un «perjuicio» para las cuentas fiscales.

En línea con la advertencia del presidente Javier Milei sobre un posible veto para no poner en riesgo el equilibrio fiscal, Francos afirmó: «Si finalmente sucediera que los diputados insistan con dos tercios ante un veto del Presidente, claramente lo que va a hacer el Gobierno nacional es cortar otras partidas para poder financiar lo que salga en esa ley».

Sobre la propuesta de un sector de la oposición, Francos manifestó: «Obviamente hay una posición que habían expresado los diputados que querían recuperar (los ingresos jubilatorios), pero justo plantean esto a un gobierno que quiere enderezar las cuentas fiscales y con esto claramente generan un perjuicio».

El funcionario adelantó que el Gobierno avanzará con el recorte de otras partidas presupuestarias para mantener el superávit fiscal y, al mismo tiempo, cumplir con la erogación que generaría la nueva ley. «La administración nacional tendrá que ver cómo lo soluciona (el perjuicio) con otras partidas», explicó Francos, y cuestionó: «Cuando uno después corta partidas viene la queja de distintos sectores porque se cortaron partidas de tal cosa o tal otra para atender esta ley».

Francos pidió a los diputados que tengan en cuenta el «gran esfuerzo por mantener las cuentas públicas en orden y poder cumplir el presidente con el objetivo que se comprometió en la campaña que es, fundamentalmente, bajar la inflación».

La mayoría de 160 votos que obtuvieron los diputados para aprobar el proyecto está a solo 11 bancas de los dos tercios que, tras una eventual aprobación del Senado y ante un veto presidencial, dejarían firme la norma. En la Cámara alta, el panorama también asoma adverso para el oficialismo.