La Travesía de «Remar Contracorriente» pasó por Bella Vista

Con más de 40° al mediodía, los remeros retomaron el cauce rumbo a Bella Vista, donde los esperaba el equipo de tierra y una reunión clave con trabajadores, pescadores y periodistas para intercambiar experiencias sobre la lucha por la soberanía del río.

Se debatieron temas urgentes: Despidos en programas esenciales como Pro Huerta, que sostenían la agricultura familiar. La falta de organización de los pescadores en Bella Vista, lo que los deja en una mayor situación de vulnerabilidad.

Los impactos ambientales, como la contaminación provocada por fábricas como la planta de jugos del barrio Centenario. Los presentes contaron que “la gente del pueblo está con temor, que está costando el comprometerse con lo que le está pasando a muchos vecinos, que se están quedando sin trabajo o con lo que le está pasando al río” Uno de los trabajadores municipales dijo también que “a este temor hay que contraponerle palabra, que a ellos les pasó como municipales, que a veces no sentían la empatía de los vecinos, hasta que salieron a contar lo que ganan, la tarea que realizan para la comunidad, lo que quieren para ellos y para Bella Vista y pudieron revertir la mirada hacia los trabajadores municipales”.

Crónica del Día 6 – Remada por la Defensa del Paraná

Desde Bella Vista (Corrientes) hasta algún rincón del Paraná rumbo a Goya, los remeros de Remar Contracorriente continúan su travesía con paradas clave en Villa Ocampo (Santa Fe), donde se encontraron con pescadores de la Asociación de Alto Verde.

Mientras la comitiva flota en la inmensidad del río, en tierra firme se tejieron historias de resistencia y memoria: desde el recuerdo del saqueo de La Forestal hasta la lucha por preservar el humedal Jaaukanigás, hoy amenazado por la instalación de un puerto cerealero.

En Bella Vista, el equipo visitó al artesano y pescador Poroto Galarza, quien construye un velero para enseñar a los más chicos a cuidar el río. También exploraron la reserva arqueológica Toropí, donde fósiles de 50.000 años nos recuerdan que el Paraná es mucho más que agua: es historia, es vida.

Próximo destino: Goya. Este viernes 7 de marzo, gran jornada de encuentro en la sede del Obispado. ¡Seguimos remando por el Paraná!